Don Bosco ha comenzado a escribir su historia como nuevo corregimiento de Panamá, lo que representa una oportunidad para iniciar una transformación urbanística para que todos sus habitantes puedan vivir mejor.
Como vecino comprometido, con vocación de más 10 años de servicio a la comunidad a través de organizaciones cívicas más importantes del país, impulse el movimiento Manos Abiertas Manos Unidas por Don Bosco para trabajar junto a otros vecinos desde la sociedad civil, aportando cada quién su granito de arena para resolver los principales problemas de la comunidad.
Estoy convencido que éste es un reto exigente, para el que resultará imprescindible el apoyo y esfuerzo de todos aquellos que compartan esta misión.